RELLENO DE PÓMULOS

Los implantes dentales son un proceso complejo, pero no por ello doloroso. La intervención se realiza con anestesia local, por lo que se adormece la zona y solo se nota más que una leve presión.

La masticación con los implantes dentales es igual de efectiva que con tus dientes naturales. Un implante te permite masticar y triturar la comida igual de bien que el resto de tus dientes. No se mueven.

Para resolver el problema de ausencia dental, existen diferentes opciones como alternativa a los implantes dentales: Puente: es un tipo de prótesis fija que se apoya sobre los dientes naturales adyacentes a la pieza que falta. Prótesis removibles: este tipo de prótesis conocida coloquialmente como dentadura postiza es de quita y pon y, aunque es un tratamiento más económico, es de inferior calidad que los implantes.

El postoperatorio de implantes dentales es bastante sencillo, aunque se deben seguir al pie de la letra las recomendaciones de nuestros odontólogos. En primer lugar, hay que evitar comer con la zona intervenida al menos durante los primeros días después de la operación. Además, las primeras horas habrá que aplicar frío local para reducir la inflamación. Por último, se recomienda evitar el tabaco, el alcohol y los alimentos muy fuertes como picantes o ácidos que puedan irritar la zona donde se ha colocado el implante dental.